Al diseñar zonas de almacenamiento, sobre todo para pesadas estanterías o material escolar, somos conscientes de la importancia de un piso que pueda soportar el uso y desgaste. Con el paso del tiempo, nuestros pisos resisten los arañazos y el punzonamiento estático, y son fáciles de mantener, lo que supone un valioso ahorro en tiempo y dinero.